El extenso parque municipal María Luisa de San Bartolomé de Torre acogió ayer sábado una jornada de reforestación en la que fueron plantados un total de 35 árboles, entre arces sacarino, árboles de Júpiter, nogales de pecam y limoneros, uno por cada niño o niña nacido en el municipio a lo largo del año 2020.
La jornada se desarrolló en un ambiente distendido y familiar, siempre bajo el estricto cumplimiento de las medidas sanitarias establecidas para hacer frente a la actual pandemia de coronavirus, y en ella participaron las familias de los menores nacidos en la localidad surandevaleña a lo largo del pasado año.
Antes de la plantación los participantes disfrutaron de un desayuno saludable, siempre guardando la distancia social entre las diferentes familias, al que prosiguió una sesión fotográfica, para finalmente proceder a plantar las distintas especies de árboles.
En el acto, promovido por el Ayuntamiento, participaron igualmente la alcaldesa de San Bartolomé de la Torre, María Eugenia Limón; y Francisco Casero, presidente de la Fundación Savia, que también forma parte de la iniciativa.
Tanto Limón como Casero dieron la bienvenida a los participantes, a los que agradecieron su asistencia, así como pusieron en valor la importancia de una iniciativa que se enmarca en la necesidad de llevar a cabo políticas, acciones e iniciativas que aborden de manera transversal los principales retos de la actual sociedad, entre ellos recuperar la conexión de la población con el territorio, frenar y revertir el cambio climático e implicar a la sociedad en su entorno.
Para la puesta en marcha de este proyecto, que lleva por nombre «Un árbol para cada nacimiento», el Consistorio bartolino ha llegado a un acuerdo con la Fundación Savia, así como a lo largo de las últimas semanas se ha creado un grupo de trabajo integrado por vecinas y vecinos, y por personas relacionadas con el medio ambiente, la educación y los parques y jardines, cuya función ha sido planificar y organizar la plantación, que igualmente tiene por objeto mejorar la calidad del patrimonio natural del municipio, reforzando de paso su identidad como pueblo.
La iniciativa también incluye informar anualmente a la Fundación Savia de los nacimientos producidos en San Bartolomé, así como de los árboles plantados, indicando su ubicación, especie y fechas de nacimiento y plantación.
Otros objetivos del proyecto pasan por asociar el nacimiento de cada bebé con la plantación de un árbol, implicando así a la familia, y ofreciendo al niño una referencia de la ubicación y la especie, así como información sobre sus cuidados o longevidad, logrando con ello un lazo afectivo entre la vida de una nueva persona y el crecimiento de un árbol.
Además, mediante agregación, la acción irá vinculando a medio plazo a las familias con su entorno y su territorio, lo que hará aumentar su compromiso y conciencia, reforzando su identidad y pertenencia, y siendo más sensibles a las posibles inclemencias a las que pueda ser sometido el patrimonio natural haciendo que forme parte de sus propias vidas.
(Fotografías: Francisco Santana y Jesús Fernando Peña)