Los productores de tomate de Francia han vuelto a manifestarse en contra de la competencia de Marruecos en el mercado de la Unión Europea. El pasado jueves, miembros de la Asociación de Organizaciones de Productores de tomate y pepino de Francia (AOP Tomate et Concombre de France) y de Hortalizas de Francia (Légumes de France) llevaron a cabo nuevas acciones de protesta para denunciar la importación de tomate marroquí, que consideran perjudicial para su sector.
Según explican los productores franceses, entre 2014 y 2023, la importación de tomate marroquí en la UE ha aumentado en un 40%, pasando de 335.000 toneladas a casi 492.000 toneladas. El principal punto de entrada de este producto en el mercado comunitario es el Mercado de Saint Charles, en Perpignan.
Los productores franceses han pedido la intervención de los futuros diputados europeos para que se revise el acuerdo UE-Marruecos en lo que respecta a los productos agrícolas y se modifique el Reglamento de información a los consumidores para que sea más visible el origen de los productos. Con la celebración de las elecciones europeas en el horizonte, los productores franceses esperan que sus demandas sean escuchadas y atendidas.
En España, las organizaciones que integran el grupo de contacto hispano-franco-italiano-portugués de tomate, como Asaja, Upa, Coag, Cooperativas Agro-alimentarias y FEPEX, han mostrado su apoyo a los productores franceses. También en nuestro país se han visto afectados por la importación masiva de tomate marroquí, lo que ha tenido graves consecuencias en el sector productivo comunitario.
Los productores franceses y españoles comparten la preocupación por la falta de control en la importación de tomate procedente de Marruecos, y esperan que las autoridades tomen medidas para proteger a los productores locales y garantizar la calidad y la transparencia en la información al consumidor.
Esta situación pone de manifiesto la importancia de establecer acuerdos comerciales justos y equilibrados entre la UE y terceros países, para no perjudicar a los productores locales y mantener un mercado sostenible y competitivo.