Nuevo método de análisis sencillo y económico permite diferenciar con precisión vinos generosos y evitar fraudes

Un equipo de investigación de la Universidad de Sevilla y la Universidad Nacional de La Pampa, de Argentina, ha validado un método de análisis sencillo y económico que diferencia con precisión la denominación de origen y el tipo de crianza de distintos vinos generosos. Esta estrategia podría ser una herramienta útil para los consejos reguladores y productores en sus controles de garantía, permitiendo evitar fraudes.

El método ha sido probado con éxito en 104 muestras de las denominaciones de origen protegidas Jerez, Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda, Montilla-Moriles y Condado de Huelva. Los resultados, publicados en la revista Microchemical Journal, confirman su eficacia y la posibilidad de su implementación en cualquier laboratorio de control en un futuro próximo.

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El sistema utilizado realiza una caracterización de los vinos generosos mediante un análisis directo y rápido de la muestra, obteniendo una huella única para cada tipo. Esto podría compararse con un «DNI único» para cada producto, lo que garantizaría su identificación y evitaría posibles suplantaciones o falsificaciones.

La investigadora de la Universidad de Sevilla Rocío Ríos, autora del artículo, explica que el objetivo a largo plazo es que la autenticación de estos vinos sea tan sencilla como incluir la muestra en un equipo portátil y pulsar un botón. «La herramienta genera una huella espectral única para cada tipo de vino, que al ser introducida en un modelo de clasificación, indicaría directamente de qué tipo se trata», señala.

Los vinos generosos se caracterizan por su sabor intenso y alta graduación, y pueden ser finos, manzanillas, olorosos, amontillados o palo cortados. Cada uno de ellos tiene características únicas determinadas por la zona geográfica de producción, la variedad de uva, el clima, el suelo y el proceso de crianza. Por esto, su caracterización y autentificación es una tarea difícil, pero este estudio ofrece una posible solución rápida, robusta y económica.

El modelo propuesto por los investigadores se basa en la Espectroscopía de Fluorescencia multidimensional de excitación-emisión, una técnica que permite examinar cómo interactúa la luz con los compuestos presentes en el vino. Con esta técnica, se obtiene un mapa tridimensional detallado que proporciona información sobre las características únicas de cada muestra.

Luego, se aplica la quimiometría, una disciplina que utiliza técnicas estadísticas, matemáticas e informáticas para analizar datos químicos. En este caso, se ha utilizado la herramienta PARAFAC (Parallel Factor Analysis), que permite extraer información relevante y comprender las propiedades y componentes de las muestras analizadas. De esta manera, se logra un análisis cuantitativo y cualitativo de los vinos estudiados.

Este método podría ser utilizado por los productores y consejos reguladores en sus análisis de control rutinarios, permitiendo establecer perfiles únicos para cada tipo de vino y evitar fraudes o suplantaciones. Los investigadores están trabajando en el desarrollo de un nuevo equipo que combine la analítica con el tratamiento de datos, lo que permitiría a cualquier usuario realizar todo el procedimiento de forma más sencilla.

Por último, se pretende ampliar el número de vinos analizados y desarrollar aún más el tratamiento de datos para simplificar el proceso y expandir su uso en las bodegas. Este trabajo ha sido financiado por el proyecto ‘Caracterización aromática y espectroscópica en combinación con técnicas quimiométricas para la autentificación de vinos generosos andaluces con denominación de origen protegida’ del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía.