La agricultura es uno de los sectores más importantes en Andalucía, y como tal, está en constante evolución y adaptación a las nuevas tecnologías. En esta ocasión, la inteligencia artificial ha llegado para revolucionar la forma en que se cultiva el cereal en la región.
MASUR Agro, en colaboración con el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) y Grupo Gallo, ha implementado técnicas de cultivo del futuro en la campiña andaluza. Estas técnicas están basadas en la agricultura de precisión, que utiliza la tecnología del dato y la inteligencia artificial para mejorar la eficiencia en la producción de trigo duro.
Gracias a esta innovadora metodología, se han cosechado 1.200 toneladas de trigo duro de máxima calidad, que Grupo Gallo ha adquirido para su planta en El Carpio. Esto demuestra que la tecnología puede aumentar significativamente el rendimiento, la eficiencia y la calidad de las cosechas, lo que beneficia tanto a los agricultores como a las empresas alimentarias.
La directora técnica de MASUR Agro, Alba Aguilar, destaca la importancia de avanzar en la digitalización y demostrar que la tecnología puede ayudar a hacer cultivos más sostenibles y rentables para los agricultores. Además, asegura que su empresa está comprometida con esta transformación tecnológica sin precedentes.
Por su parte, el responsable de Trigo de Grupo Gallo, José Chacón, supervisó el inicio de la cosecha en el campo de Écija, donde se ha desarrollado este proyecto. Con la compra de esta cosecha, Grupo Gallo sigue apostando por la sostenibilidad de la cadena alimentaria y apoya a los agricultores que utilizan técnicas innovadoras.
Este proyecto no es el único que MASUR Agro está llevando a cabo en Andalucía. También tienen otros proyectos en la provincia de Cádiz, donde obtienen datos sobre la evolución del rendimiento de cultivos como el tomate o el cereal. Además, colaboran con empresas e instituciones como la Universidad de Córdoba para aplicar a escala comercial los proyectos de investigación que se desarrollan.
La agricultura de precisión permite controlar en todo momento lo que demanda el cultivo y aportarle lo que necesita en el momento adecuado para obtener la máxima calidad. En este caso, además de la tecnología, se ha utilizado también los fertilizantes Impact Zero de Fertiberia, que ayudan a reducir las emisiones en los cultivos y hacen que sean más sostenibles.
El objetivo final de esta colaboración entre MASUR Agro y Grupo Gallo es obtener un trigo de mayor calidad y más sostenible, reduciendo así el impacto de la huella de carbono en la actividad agrícola. La introducción de la inteligencia artificial en la agricultura andaluza demuestra una vez más que el sector está en constante evolución y adaptación a las nuevas tecnologías para ser más eficiente y sostenible.
