La organización portuguesa Madre Fruta ha decidido reducir su producción de fresas a tan solo una hectárea debido a la falta de rentabilidad en este cultivo. En su lugar, han apostado por la frambuesa y el arándano, entre otros frutos rojos. Esta información fue dada a conocer por Carla Monteiro, del departamento de agricultura de la organización, durante el 9º Congreso Internacional de Frutos Rojos de Huelva.
Madre Fruta es una organización formada por alrededor de 50 socios, en su mayoría agricultores, que centraliza las ventas y ofrece servicios como facturación y control de calidad. Actualmente, cuentan con un total de 302 hectáreas en producción, de las cuales 163 corresponden a frutos rojos, siendo la frambuesa el cultivo principal con 111 hectáreas. Sin embargo, la fresa solo ocupa una hectárea y el resto se divide entre arándanos y moras. También tienen 132 hectáreas de aguacate, concentradas en las zonas de Faro y la zona oriental.
La falta de agua debido a la sequía y la necesidad de utilizarla de manera eficiente y sostenible es una preocupación compartida por los agricultores portugueses y onubenses. En este sentido, Monteiro destacó la importancia de encontrar fórmulas para optimizar el uso del agua y reutilizarla en la medida de lo posible.
Otra de las preocupaciones abordadas en el congreso fue la respuesta de los mercados y su disposición a pagar por productos de calidad y producidos de manera sostenible. Monteiro puso en duda si los consumidores están dispuestos a asumir los costos adicionales que conlleva mantener certificaciones de calidad reconocidas por los distribuidores y grandes superficies.
En el congreso también participaron otros expertos, como Kevin Schooley de Nasga, quien habló sobre las tendencias de producción de fresas en América del Norte. Según Schooley, el consumo de fresas se está estabilizando en esta región, por lo que los productores están buscando formas de mantener la demanda durante todo el año y cerrar el ciclo anual. También se abordaron temas como la preocupación por la sequía y la sostenibilidad de los cultivos, así como la importancia de seguir avanzando en innovación tecnológica.
En resumen, la reducción de la producción de fresa por parte de Madre Fruta debido a la falta de rentabilidad es una muestra de los desafíos a los que se enfrentan los agricultores en la actualidad. La búsqueda de alternativas y la innovación son clave para mantener la sostenibilidad de este sector tan importante.