FAO designa al Banco de Germoplasma del Olivo de Córdoba como centro de referencia internacional para la preservación y mejora del cultivo

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha designado al Banco de Germoplasma Mundial del Olivo de Córdoba como centro de referencia internacional, en un acto en el que estuvo presente el consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco.

Este reconocimiento, propuesto por la Consejería de Agricultura a través del Ministerio, destaca el importante papel que desempeña el Banco de Germoplasma del Olivo en la preservación de la genética del olivar y en la investigación de nuevas variedades que mejoren la rentabilidad para los agricultores. Desde su creación en 1970, este centro ha colaborado con instituciones de relevancia tanto local como internacional.

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El Banco de Germoplasma del Olivo se encuentra ubicado en las instalaciones del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (Ifapa) de Alameda del Obispo, así como en el campus Rabanales de la Universidad de Córdoba. En este sentido, el consejero de Agricultura ha destacado la importancia del olivar como el cultivo más representativo de Andalucía, con más de 1,6 millones de hectáreas de superficie y una producción que representa el 80% de la producción nacional.

Además, coincidiendo con la firma del acuerdo, el Banco Mundial de Germoplasma del Olivo ha recibido el Premio Honorífico en el VIII Encuentro Frutado Intenso de la Denominación de Origen Estepa por su defensa y promoción del olivar. Este reconocimiento se une a la I Estrategia Andaluza para el Sector del Olivar, que será aprobada próximamente y que tiene como objetivo fortalecer el liderazgo oleícola y en aceituna de mesa a nivel mundial, aumentando su productividad y competitividad.

Entre los aspectos que se destacan en esta estrategia se encuentran la valorización de los subproductos del olivar a través de la economía circular, el relevo generacional y la promoción del olivar como bosque mediterráneo y sumidero de dióxido de carbono. Sin duda, un reconocimiento más para el olivar andaluz y su importante papel en la economía de la región.