España logra un importante avance en la pesca del Mediterráneo gracias a medidas acordadas en la UE

La flota de arrastre de fondo que opera en el mar Mediterráneo ha conseguido un importante avance gracias a las medidas acordadas en el Consejo de Ministros de Pesca de la Unión Europea en diciembre de 2023. España ha logrado que se añada un 5% de días adicionales a los 6.116 días ya establecidos, lo que significa un total de 6.422 días para la pesca con este tipo de artes.

Esto ha sido posible gracias al cumplimiento de dos de las condiciones del «mecanismo de compensación», que permite la recuperación de días de pesca adicionales siempre y cuando se cumplan ciertas medidas. Una de ellas es establecer una veda a la pesca con artes de arrastre de fondo a una profundidad superior a 800 metros en los buques españoles en el Mediterráneo.

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Para ello, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha publicado en el Boletín Oficial del Estado una modificación del anexo III de la orden ministerial de 18 de mayo de 2020, que establece un plan de gestión para la conservación de los recursos pesqueros demersales en el mar Mediterráneo.

Otra de las condiciones ha sido el cumplimiento de las paradas de la flota de cuatro semanas ininterrumpidas, que ya estaban reguladas en el mismo anexo III de la orden ministerial y que se modificaron en febrero pasado.

Para poder alcanzar el 6% de días adicionales, se deberá aplicar una tercera medida de manera voluntaria, que consiste en cambiar la malla a 45 mm en el caso de la pesquería costera y a 50 mm en la pesquería de profundidad, o bien establecer puertas voladoras, según decida el armador. Se espera que próximamente se publique una convocatoria para que los buques informen de su intención de aplicar estos cambios y así optar a más de 1.200 días adicionales de pesca, correspondientes al 1% restante del mecanismo de compensación.

Con esta orden publicada hoy, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación reafirma su compromiso con el sector pesquero y con una gestión responsable de los recursos, teniendo en cuenta los aspectos ambientales, sociales y económicos de la sostenibilidad, tal como se establece en la Política Pesquera Común y en la Ley de Pesca Sostenible e Investigación Pesquera. Esto demuestra una vez más la importancia de una gestión integral y sostenible en la pesca.