España avanza hacia la convivencia entre energía y agricultura con el crecimiento de parques fotovoltaicos y la promoción de tecnologías agrivoltaicas

Según el último informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en España los parques fotovoltaicos ocupan una superficie equivalente al 0,2% de la superficie agraria útil, lo que representa aproximadamente 50.000 hectáreas.

El documento, titulado «Extensión de los parques fotovoltaicos en España», destaca que las comunidades autónomas de Castilla-La Mancha y Extremadura son las que presentan un mayor desarrollo en este tipo de instalaciones, con una superficie de cerca de 11.460 y 11.340 hectáreas respectivamente, lo que supone el 48% del total en el país.

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Este informe, que forma parte de la serie «Agrinfo» del Ministerio, analiza los datos del Registro Administrativo de Instalaciones de Producción de Energía Eléctrica y de la Encuesta de Superficies y Rendimientos de Cultivo, y estima que en los próximos años la superficie de parques fotovoltaicos podría alcanzar las 100.000 hectáreas si se ejecutan todos los proyectos evaluados de grandes instalaciones (superiores a 50 megavatios).

Además, se destaca que en los últimos tres años se ha producido un aumento acelerado en la superficie de parques fotovoltaicos, con un crecimiento anual superior al 20%. También se menciona que la mayoría de las nuevas hectáreas de paneles solares provienen de tierras de secano, seguidas de tierras de regadío y de superficies forestales y no agrarias.

Ante esta situación, el gobierno está trabajando para fomentar la convivencia entre los sectores energético y agrario. Una de las medidas que se están promoviendo es la implantación de tecnologías agrivoltaicas, que permiten la coexistencia de la producción agraria y la generación de energía solar en una misma superficie.

Para ello, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación lidera un grupo de trabajo interministerial sobre energía agrivoltaica, con el objetivo de establecer criterios y requisitos que definan este concepto y promover un marco regulatorio adecuado para las inversiones en este tipo de proyectos.

En resumen, los parques fotovoltaicos en España están ocupando una superficie mínima en comparación con la superficie agraria útil, pero su crecimiento es constante y se están buscando soluciones para compatibilizar la producción de energía y la actividad agraria en un mismo espacio.