A partir del 1 de enero de 2025, las empresas del sector de frutas, hortalizas, flores y plantas vivas deberán cumplir con nuevas obligaciones en cuanto a la gestión de residuos y envases comerciales. Así lo establece el Real Decreto 1055/2022, publicado en el BOE el pasado 28 de diciembre de 2022.
La Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas vivas (Fepex), junto con Ecoembes, ha organizado un webinar para informar a las empresas del sector sobre estas nuevas obligaciones. En el webinar, celebrado el pasado miércoles, se explicaron las cuatro principales obligaciones que deberán cumplir las empresas a partir de 2025.
En primer lugar, los productores y envasadores deberán inscribirse en un Registro de Productores de Producto, donde deberán declarar cada elemento de envase, su peso y material. Sin embargo, los envases destinados a la exportación quedan excluidos de esta obligación.
En segundo lugar, las empresas deberán informar sobre los envases comerciales e industriales que pongan en el mercado. En tercer lugar, deberán adherirse a un Sistema de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) para envases comerciales e industriales. Y por último, deberán pagar las cuotas correspondientes a este nuevo sistema.
En el webinar, los representantes de Ecoembes, Francisca Dal Molin y Laura Ramos Gómez, informaron de que la entidad ya ha constituido su nuevo SCRAP para envases comerciales.
Esta no es la primera vez que se organizan actividades para informar a las empresas del sector sobre las obligaciones en materia de gestión de residuos y envases. El año pasado también se llevaron a cabo jornadas con el mismo objetivo.
La Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP) es una política medioambiental que responsabiliza a los productores de todo el ciclo de vida de los productos que introducen en el mercado. Esta responsabilidad ya estaba incluida en anteriores Directivas comunitarias y normativas nacionales de envases y residuos de envases, y afectaba únicamente a los envases domésticos. Sin embargo, con la entrada en vigor del Real Decreto 1055/2022, esta responsabilidad se amplía a los envases comerciales e industriales, y será obligatoria a partir del 1 de enero de 2025.
Con esta medida, se busca fomentar la economía circular y la gestión sostenible de los residuos en el sector de frutas, hortalizas, flores y plantas vivas. Se espera que las empresas se adapten a estas nuevas obligaciones y contribuyan a un futuro más sostenible.