Investigadores del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (Ifapa ), del Instituto de Agricultura Sostenible del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IAS-CSIC ) y del Departamento de Producción Animal de la Universidad de Córdoba (UCO ) han desarrollado un nuevo método para determinar la estabilidad oxidativa y composición acídica del aceite de oliva de manera rápida y consistente.
Este importante avance permitirá evaluar la calidad del aceite de oliva de forma más eficiente y precisa, y supone una alternativa no destructiva a los métodos tradicionales que requieren mucho tiempo y el uso de productos químicos contaminantes.
El método se basa en la espectroscopia de infrarrojo cercano (NIRS), una técnica que permite analizar múltiples muestras en tan solo 2 minutos y con solo 1 ml de aceite. Esto lo convierte en una herramienta muy útil para empresas y laboratorios dedicados a la caracterización de aceites de oliva.
El estudio, publicado como artículo de portada en la revista Agriculture, ha evaluado el uso potencial de la NIRS para analizar la estabilidad oxidativa y la composición acídica del aceite de oliva virgen extra. Para ello, se analizaron 318 muestras de diferentes variedades y selecciones de olivo, lo que permitió obtener una gran variabilidad en los resultados.
Los investigadores demostraron que los modelos de predicción desarrollados a partir de los espectros NIRS obtenidos ofrecen excelentes resultados en la predicción de los ácidos grasos y la estabilidad oxidativa del aceite de oliva. Además, se comprobó que las variedades y selecciones analizadas se clasificaban de manera similar a como lo hacían con los métodos tradicionales.
Este avance puede ser de gran interés para la selección de nuevas variedades de olivo con alto contenido en ácido oleico y alta estabilidad, lo que contribuiría a mejorar la calidad del aceite de oliva producido. Además, supone un importante avance en la caracterización de AOVE en general y en programas de mejora de olivo en particular.
El equipo de investigadores responsable de este trabajo está formado por Hande Yılmaz-Düzyaman, Raúl de la Rosa, Leonardo Velasco, Nieves Núñez-Sánchez y Lorenzo León. Sus resultados suponen un gran avance en el sector del aceite de oliva y demuestran una vez más el potencial de la investigación en este ámbito.
En definitiva, este nuevo método para determinar la estabilidad oxidativa y composición acídica del aceite de oliva es una excelente noticia para el sector, ya que permitirá evaluar la calidad de los aceites de manera más rápida, eficiente y precisa. Sin duda, un avance que contribuirá a seguir mejorando la calidad del aceite de oliva producido en Andalucía.