Viveros Hernandorena lidera la modernización del cultivo del algarrobo en España, aumentando su rentabilidad y sostenibilidad

Viveros Hernandorena lidera la modernización del cultivo del algarrobo tradicional a regadío intensivo en España. Como principal productor y exportador mundial de algarroba, con un volumen anual entre 60 mil y 80 mil toneladas de fruto entero y una superficie de 45.000 hectáreas, el país ha visto un descenso en la producción debido a la competencia de otros cultivos más rentables y el avance de la construcción en zonas litorales.

Ante esta situación, Viveros Hernandorena decidió apostar por la modernización del cultivo del algarrobo, anticipándose a las demandas de productores, industria y consumidores. En colaboración con la Asociación de Empresas Innovadoras de la Garrofa (EiG), el vivero puso en marcha en 2011 un proyecto experimental de I+D para mejorar la productividad y eficiencia de este cultivo.

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Gracias a esta alianza y al know-how del vivero, se han logrado importantes mejoras en la multiplicación de árboles injertados en vivero y en los rendimientos de las nuevas plantaciones. De esta manera, se está transformando el cultivo del algarrobo tradicional de secano a un regadío intensivo, aumentando su rentabilidad.

La selección de patrones y variedades, tanto hembras como hermafroditas, se ha realizado en diferentes zonas productoras del litoral mediterráneo, con el objetivo de obtener un material vegetal de máxima calidad y excelentes cualidades. Además, Viveros Hernandorena ha implementado innovadoras técnicas de multiplicación de injerto y cultivo in vitro en su campo experimental, logrando una mayor optimización y eficiencia en todos los procesos.

Como resultado de este esfuerzo técnico y económico, se ha conseguido desarrollar árboles que dan sus primeros frutos a los tres años, adelantando en varios años la entrada en producción en comparación con los algarrobos tradicionales. Además, se espera alcanzar una producción mínima de 15.000 kilos por hectárea, en contraste con los 3.000-4.000 kilos por hectárea de las plantaciones tradicionales.

El cultivo del algarrobo tiene una ventaja competitiva en su escasa necesidad de agua, lo que lo hace ideal para zonas donde otros cultivos no son rentables debido a la sequía o la incidencia de plagas. Además, su rusticidad, escasa incidencia de plagas y bajos costes lo convierten en una opción atractiva para los agricultores.

En Viveros Hernandorena son expertos en este cultivo, produciendo 80.000 patrones anuales y más de 40.000 plantas de algarrobo comercializadas. Gracias a su sistema de producción diferencial, garantizan la calidad, sanidad y adaptación posterior a la explotación agrícola de sus plantas.

Otra ventaja de este cultivo es su alto valor ambiental, ya que contribuye a la conservación de los ecosistemas naturales y ayuda a prevenir la desertización. Además, según un informe de la Asociación «Empresas Innovadoras Garrofa» (EIG), el algarrobo tiene un alto potencial para mitigar el cambio climático, ya que es capaz de absorber CO2 de la atmósfera.

La demanda de algarroba es alta debido a su versatilidad como materia prima para la industria alimentaria, cosmética, farmacéutica y de nutrición animal. Además, su creciente popularidad como alimento saludable ha aumentado su demanda.

Viveros Hernandorena lidera el desarrollo sostenible de esta producción saludable para las personas y el planeta, garantizando un suministro constante de planta de algarrobo durante todo el año. Su apuesta por la modernización del cultivo del algarrobo está impulsando la rentabilidad y la sostenibilidad de este cultivo minoritario en España.