Una vecina de Cartaya, María del Rosario Gómez Javier, ha entregado este lunes en el Ayuntamiento de la localidad un escrito firmado por doce residentes de su misma calle (Paraguay), en el que expresa sus quejas por la filtración de aguas fecales a la vía pública de un bloque de viviendas colindante con su domicilio, una situación que asegura viene padeciendo desde el año 2012 sin que el Consistorio, a pesar de las “incontables ocasiones” en las que se ha dirigido al mismo “solicitando ayuda por su parte”, haya adoptado “medida alguna al respecto bajo la excusa de que la filtración corresponde a los propietarios del bloque, a pesar de que una de las partes afectadas y perjudicadas es la vía pública, lugar que sí corresponde al Ayuntamiento mantener y cuidar”, según reza el propio escrito.
María del Rosario asegura igualmente en su escrito que “la situación es insostenible” y que “es imposible vivir en estas condiciones y con este olor, por lo que ha querido aprovechar su queja para “invitar a nuestro señor alcalde (por el independiente Juan Polo) a que se pase en persona por la zona y que valore él mismo si es posible vivir en esta situación”, de manera que así “podrá valorar fehacientemente si existe o no motivo para la presentación de este escrito”, el cual señala “no me cabe la menor duda, será ignorado completamente”.
En el escrito esta vecina de Cartaya añade que no le cabe la menor duda de que el Ayuntamiento “no está realizando su cometido correspondiente, ya que entiendo que la obligación de una entidad como es un Ayuntamiento, debería ser la de velar por todos los ciudadanos ya que en última instancia son éstos los que les proporciona los votos necesarios para que les representen, y en este caso parece ser que el señor alcalde nos considera ciudadanos de tercera”.
Y es que en declaraciones a HuelvaCosta.com, María del Rosario se ha mostrado convencida de que si esta situación se estuviese produciendo en alguna calle de otro punto de la localidad en lugar de en la barriada de Puerto Escondido “ya estaría solucionada, cuando nosotros somos vecinos tan honrados y pagamos nuestros impuestos como el resto”.
Según informa la propia vecina, el bloque del que proceden las aguas fecales es colindante con su domicilio y se encuentra en la confluencia de las calles Harina y Paraguay. En dicho punto, “hay una constante filtración de aguas fecales que desembocan en la vía pública, con el ya consabido olor y lo que todo ello conlleva, además de la cantidad de insectos que atrae.
Llevo con esta situación “la friolera ya de cuatro años”, añade “durante los cuales me he puesto en contacto en innumerables ocasiones con el Ayuntamiento de Cartaya a fin de que diesen una solución al tema ya que el bloque en cuestión es propiedad de una entidad bancaria y se encuentran en estado de ocupación”, y sus inquilinos se “desentienden” de la reparación de la avería.
“SI TIENE PROBLEMAS CON LOS MOSQUITOS, ÉCHESE AUTÁN”
La indignación de María del Rosario es aún mayor al asegurar que por parte de personal del Ayuntamiento, y al problema concreto de los mosquitos que acuden atraídos por las aguas fecales, la contestación es que “si tiene usted problemas con los mosquitos, échese Aután”, una “maravillosa contestación –prosigue- a un ciudadano al cual se supone que representa este organismo”.
No es la primera vez que estos vecinos hacen públicas sus quejas por este mismo motivo a través de los medios de comunicación ya que se muestran convencidos de que son éstos su “única esperanza” de poner fin al problema.