La Guardia Civil investiga un asalto a punta de pistola perpetrado en la madrugada de este miércoles, 7 de septiembre, en un conocido local de juegos situado en la zona portuaria de Isla Cristina.
Según han narrado a huelvacosta.com testigos presenciales, el autor de los hechos fue un varón que en el momento del asalto vestía un mono blanco y que accedió al interior de la sala del bingo de dicho local sobre las 4.30 horas de la madrugada con una capucha para ocultar su rostro, y con una pistola (al parecer de fogueo), con la que incluso efectuó un disparo intimidatorio.
Otras fuentes consultadas han señalado que el atracador se hizo con la recaudación que en ese momento había en la caja registradora del bingo, unos 2.800 euros, tras lo cual huyó antes de que llegara la Guardia Civil, la cual “no tardó mucho en acudir” a la llamada de los empleados de la sala.
Según han señalado algunos clientes de dicho establecimiento, que se divide en salón de juegos por una parte, y en el bingo asaltado por otra, el atracador solo accedió a esta segunda estancia “por ser menos concurrida”, ya que en la primera “suele haber siempre más clientes a esas horas de la madrugada”.
Este atraco se enmarca en la oleada de robos que vienen padeciendo desde hace meses numerosos establecimientos comerciales de Isla Cristina, aunque en esta ocasión el modus operando no es el mismo ya que la mayoría de los saqueos se están llevando a cabo mediante el método del gato hidráulico y cuando los comercios ya están cerrados al público.
ATRACO EN ENERO A UN SALÓN DE JUEGOS DE LA MISMA EMPRESA EN CARTAYA
Por otra parte, y según ha podido saber huelvacosta.com, el pasado 12 de enero fue asaltado en Cartaya, e igualmente a punta de pistola, un salón de juegos propiedad de la misma empresa que gestiona el bingo isleño atracado este miércoles.
Dicho local se encuentra situado en la barriada de La Pila, y entonces los autores irrumpieron en el mismo armados y con los rostros cubiertos con capuchas y gafas de sol, logrando sustraer entre 3.500 y 4.000 euros.
Según indicaron entonces fuentes policiales, los hechos se produjeron justo a la hora del cierre del negocio, entre las doce y media de la noche y la una de la madrugada, cuando entre tres y cuatro individuos con capuchas y gafas de sol irrumpieron en el local portando dos armas, un revólver y una pistola, con las que encañonaron al camarero para que les facilitase la recaudación del día.
Las mismas fuentes afirmaron que el número de asaltadores no se pudo concretar porque rompieron las cámaras de seguridad del interior del local y porque encañonaron al camarero boca abajo.
También señalaron que se desconocía si las armas que portaban los atracadores eran reales, así como sí pudieron confirmar que no se produjeron daños personales ni ningún tipo de lesión durante el asalto.
La Policía Judicial de la Guardia Civil también investigaba en aquellos momentos si este atraco de Cartaya guardaba alguna relación con otro de parecidas características que se produjo la noche anterior en Punta Umbría, cuando tres individuos atracaron a las 22.00 horas a punta de pistola otro salón de juegos en la avenida de Andalucía, sustrayendo una cantidad no determinada de dinero en efectivo, que algunas fuentes cifraron hasta en 8.000 euros.
