Los robos siguen produciéndose en Cartaya y, si en las pasadas semanas fueron asaltadas dos viviendas en pleno centro de la localidad, una de ellas de madrugada y mientras sus moradores dormían dentro, en esta ocasión los amigos de lo ajeno lo han intentado a plena luz del día, también en pleno centro del municipio, y mientras se concentraban numerosos vecinos en las plazas Larga y Redonda con motivo de un desfile de moda.
No obstante, según ha relatado a este periódico el propietario de la vivienda, un conocido médico local cuya consulta se encuentra en la planta baja de su propia casa, el sistema de alarma y seguridad privada con el que está equipado el edificio, ubicado en la calle santa María de Consolación, frustró las intenciones de los amigos de lo ajeno.
Según ha detallado el afectado, los autores del intento de asalto accedieron a la azotea del edificio pasadas las seis de la tarde de este sábado a través de una obra anexa que “lleva ya parada varios meses”, para desde allí “colgarse literalmente con una cuerda a través de un patio interior que da acceso a la vivienda”. No obstante, afirma, “al entrar en la casa dos asaltantes fueron sorprendidos por la alarma y fotografiados ‘in fraganti’ por las cámaras de seguridad, por lo que huyeron inmediatamente”.
El médico cartayero, que no se encontraba en esos momentos en su domicilio, fue rápidamente alertado, por lo que se personó en su casa junto con la Guardia Civil, ante la cual ha interpuesto la correspondiente denuncia y a cuyos agentes ya ha hecho entrega del material gráfico captado por su sistema de seguridad.
También asegura que antes de intentarlo por la azotea, lo hicieron por el patio de la planta baja con el objeto de acceder directamente a la consulta, para lo cual usaron incluso varias herramientas que encontró sobre una mesa, pero “se ve que al serles imposible pasaron a la acción por la azotea”.
Finalmente ha asegurado que está ya “desesperado” por tratarse este del “cuarto robo” del que ha sido objeto en su casa este mismo año”. Según concluye, tres de ellos han sido frustrados, el último hace tan solo dos meses, aunque en otro anterior, hace siete meses, el autor o autores lograron acceder a un trastero del que sustrajeron unos 20.000 euros en material de óptica.
