Miembros del consejo escolar del Centro de Educación Infantil y Primaria La Higuerita, situado en la pedanía de Pozo del Camino, la cual comparten los Ayuntamientos de Isla Cristina y Ayamonte, han hecho un llamamiento ante la situación de “abandono” que aseguran padece dicho colegio.
Así lo ha explicado a HuelvaCosta.com María Martín, una de las integrantes del consejo escolar, quien ha señalado que el hecho de ser un centro cuyas competencias están repartidas entre ambos Consistorios, es un “auténtico problema” para toda la comunidad escolar ya que “se pasan continuamente la pelota de uno a otro” y “así llevamos varios años”. Para colmo, señala, tampoco encuentran el apoyo de la Junta de Andalucía a la hora de mediar en esta situación para dar solución a las “numerosas carencias” que, aseguran, no pararán de reivindicar.
El último gran problema que han padecido, afirman, es la falta de conserje entre el pasado día 30 de mayo y prácticamente el último día de clases, cuando “el Ayuntamiento de Ayamonte mandó a una persona, la cual no sabemos si seguirá cuando se reanuden las clases en septiembre”.
Otras carencias que han lamentado en declaraciones a HuelvaCosta.com son la falta de adecuada señalización en la carretera cercana al centro, así como de un Policía Local que regule el tráfico a la hora de entrada y salida de los menores; la inexistencia de acerado alrededor del centro; la falta de iluminación y de luces de emergencia; el incumplimiento de la ley en cuanto al vallado perimetral del centro, que debe tener una altura mínima de 2,2 metros, la cual no tiene, suponiendo un peligro para los niños, que en determinados puntos podrían caer a una altura de hasta tres metros; o la falta de potencia energética en el centro, que les impide al menos aportar ellos mismos calefactores para que los menores no pasen frío en invierno, ya que “si los enchufamos salta el automático”. También lamentan que los alrededores del colegio “son un auténtico fangal cuando llueve.
No te pierdas las declaraciones de estas madres de Ayamonte e Isla Cristina preocupadas por la seguridad y la educación de sus hijos.