La prueba del limón ha sido muy utilizada por expertos psicólogos de personalidad y es muy fácil de hacer en casa, por lo que te revelaremos los secretos para que sepas a ciencia cierta si eres extrovertido o introvertido.
Para hacerla necesitarás:
- El zumo concentrado de un limón.
- Un bastoncillo de algodón.
- Hilo.
Instrucciones:
- Ata un pequeño trozo del hilo justamente al centro del bastoncillo de algodón.
- Coloca un extremo del bastoncillo en la lengua por 20 segundos.
- Saca el bastoncillo y colócate en la lengua 5 gotas del zumo concentrado del limón.
- Traga y colócate el otro extremo del bastoncillo en tu lengua por 20 segundos.
- Saca el palillo e inmediatamente tómalo por el hilo que amarraste en el centro.
Si la parte del bastoncillo que utilizaste después del zumo de limón cuelga más bajo, sugiere que te provocó salivar más de lo normal, lo que es indicativo a nivel fisiológico a que tiendes a ser una persona más introvertida. En cambio, si el bastoncillo se mantiene en posición horizontal, significa que el nivel de salivación se mantuvo normal en ambas condiciones, lo que indica que tiendes a ser una persona más extrovertida.
Explicación científica:
En la década de los sesenta, dos de los pioneros de la psicología de la personalidad, Hans y Sybill Eysenck, utilizaron equipos hipersensibles de pesaje para medir la cantidad de saliva absorbida por el algodón luego de las personas haber estado expuestas a la prueba, intentando probar así la teoría de “excitación cortical” sobre extroversión e introversión.
Aunque los resultados de la prueba no tienen actualmente un carácter totalmente científico, es una excelente forma de ver cómo reacciona nuestro sistema basal y nervioso ante los estímulos fuertes.