La Misericordia de Lepe saldrá finalmente el Jueves Santo, aunque desde una carpa

Ante la controversia generada, la Junta de Gobierno ha vuelto a reunirse este lunes y ha decidido realizar el desfile procesional, aunque “cambiando por completo el itinerario” y partiendo de una carpa instalada a tal efecto en la calle Concordia

Después de la decisión adoptada el pasado sábado por la Junta de Gobierno de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia, María Santísima de la Esperanza y San Juan Evangelista y Nuestra Señora del Amor de Lepe, de suspender su estación de penitencia de la noche del Jueves Santo para no “exponer” su patrimonio debido a las obras que se acometen en la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán, y de la repercusión social que en la localidad ha tenido tal supresión, los responsables de dicha Cofradía han vuelto a reunirse este lunes y han decidido realizar finalmente el desfile procesional aunque “cambiando por completo el itinerario” y partiendo de una carpa que se va a instalar a tal efecto en la calle Concordia, junto a la Capilla del Carmen.

Así lo ha indicado la propia Hermandad en un comunicado, en el que señala que entre el Domingo de Ramos y el Lunes Santo por la mañana la Hermandad, conjuntamente con el Ayuntamiento de Lepe y el Consejo de Hermandades, han estado estudiando todas las posibilidades para que la Cofradía pueda salir”. Como resultado de dichas conversaciones “el Ayuntamiento de Lepe se ha comprometido a instalar una carpa en la calle Concordia, junto a la Capilla del Carmen, para que desde allí la hermandad pueda realizar su salida procesional”.

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Tras conocer dicho compromiso, la Junta de Gobierno se ha vuelto a reunir este lunes en sesión extraordinaria acordando por unanimidad “realizar la estación de penitencia del Jueves Santo, cambiando por completo el itinerario de la Cofradía, el cual será confirmado en las próximas horas”.

En el mismo comunicado la Junta de Gobierno agradece “el apoyo mostrado por todas las entidades, en especial el Ayuntamiento de Lepe por el interés mostrado y toda la ayuda que ha aportado y va a aportar”, al tiempo que pide disculpas a sus hermanos “por estos días de intranquilidad que llevamos, donde se han tenido que tomar decisiones muy duras, y que esperamos que todos comprendan, o al menos respeten”.

Por todo ello, concluye, la Hermandad “está en estos momentos trabajando para poner a punto todo lo necesario para poner en la calle su Cofradía”, e irá informando “de todos los cambios que se realicen tanto en el itinerario como en el horario”.

SUSPENSIÓN POR OBRAS

La suspensión de la estación de penitencia de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia, María Santísima de la Esperanza y San Juan Evangelista y Nuestra Señora del Amor de Lepe cayó este fin de semana como un jarro de agua fría en el municipio costero, cuyos vecinos veían como perdían este año uno de los referentes de su Semana Santa, así como la oportunidad de disfrutar de uno de sus rasgos diferenciales: la carga del paso de palio de Nuestra Señora del Amor exclusivamente por mujeres costaleras.

La Junta de Gobierno explicó entonces que tras buscar varias soluciones para realizar su estación de penitencia se vio obligada a renunciar a la misma “para no exponer” su patrimonio ya que la Parroquia está en obras y “no reúne las condiciones necesarias”.

La Junta de Gobierno señaló entonces en un comunicado que “la única solución razonable es no exponer nuestro preciado patrimonio, en particular nuestra imágenes devocionales” ante las “condiciones tan adversas” que presenta el Templo, por lo que la Cofradía “no realizará la estación de penitencia del Jueves Santo de 2017”.

En el mismo explicó que con motivo de las obras en la Parroquia, la Hermandad “tuvo que trasladar sus imágenes titulares hasta la Capilla del Carmen en el mes de septiembre”, fecha en la que “se había acordado en pleno de hermanos mayores en sección de penitencia que todas las cofradías que realizan estación de penitencia desde dicha Parroquia habrían de hacerlo desde allí, ya que el Templo se acondicionaría para ello”.

Con esta premisa, proseguía el comunicado “llegamos al mes de febrero, momento en el cual, en un nuevo pleno de hermanos mayores de penitencia, dos de las tres cofradías que firmaron ese acuerdo deciden unilateralmente rescindirlo, estableciendo sus salidas desde otras ubicaciones”.

En este sentido y tras la “disconformidad” planteada por la Hermandad del Cristo de la Misericordia ante el Consejo de Hermandades y el párroco de la localidad, “se nos insta a que busquemos soluciones alternativas a la salida desde el Templo”. Todas las opciones que se barajaron resultaban “inviables”, explicó la Hermandad, sobre todo “por la altura de nuestros pasos, en concreto la de la imagen del Cristo de la Misericordia”.

Así, y “vista la imposibilidad de realizar la salida desde otra ubicación, la Junta de Gobierno estudia la posibilidad de no realizar la estación de penitencia”, por lo que “tras diversas conversaciones con el Consejo de Hermandades y el párroco, se alcanza el compromiso de que las obras se paralizarían con el fin de poder adecuar la Parroquia para recibir a nuestros titulares y realizar la estación de penitencia”.

Un hecho que finalmente no ha sido así, por lo que el pasado viernes, fecha en la que se había acordado realizar el traslado de los pasos y su montaje, “el Templo no reunía las mínimas condiciones para albergar nuestro patrimonio más preciado, nuestros sagrados titulares”. Entre las anomalías detalladas entonces por la Hermandad destaca la presencia de “una capa de arena en el suelo, varios palés de cemento en la misma zona donde se iba a ubicar nuestros pasos, un plástico que ni separa ni aísla de la zona que supuestamente se había habilitado, o que la puerta de la Parroquia tenga un hueco por su parte inferior de unos 20 centímetros”.

“A pesar de todos estos inconvenientes –proseguía- la Junta trabaja para adecentar la zona y realiza el montaje de los pasos al completo”, pero “en el día de hoy (por el sábado), dada la preocupación por las condiciones del espacio, la Junta de Gobierno se reúne con el párroco, la presidenta del Consejo de Hermandades y el constructor para hacerles llegar la preocupación e intentar buscar soluciones a dichos problemas”. En dicho encuentro “se acuerda hacer pequeñas mejoras, aunque el mayor de los inconvenientes es que nos informan de que la obra no se va a parar, aun estando nuestros titulares dentro del Templo”.