La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas, una de ellas menor de edad, como presuntas autoras de un delito contra la salud pública por cultivo de droga, y otro de defraudación de fluido eléctrico.
La denominada operación ‘Black Garlic’ comenzó el pasado mes de enero al detectarse un incremento de cultivos de marihuana en zona urbana cercana a la capital. Por ello, entre los días 16 y 23 de marzo se procedió a la explotación de la operación, llevándose a cabo el desmantelamiento de una plantación de marihuana tipo ‘indoor’ ubicada en el interior de una casa de campo en el término municipal de Trigueros.
Las investigaciones fueron complicadas debido a las medidas de protección que empleaban los detenidos, entre ellas las vigilancias en un vehículo por parte de uno de los implicados alrededor de la vivienda cuando los otros tres varones se encontraban dentro realizando labores de mantenimiento de la plantación.
Tras solicitar y obtener el correspondiente mandamiento judicial de entrada y registro de dicha vivienda, ésta se efectuó el pasado día 16 de marzo, dando como resultado la incautación de 318 plantas de marihuana, que arrojaron un peso total de 21,800 kilos, así como de otros utensilios para la obtención de la droga.
Por su parte los operarios de la compañía suministradora de electricidad certificaron la defraudación del fluido eléctrico, habiéndose realizado por los detenidos una doble acometida desde un poste de electricidad cercano, permaneciéndose a la espera de una estimación por parte esta empresa del importe defraudado en ese aspecto.
Los detenidos y las diligencias instruidas han sido entregados en el órgano judicial competente, así como se ha remitido una copia a la Fiscalía de Menores, por la detención del menor, el cual permanece en custodia de sus padres.
La operación continúa abierta por lo que no se descartan nuevas detenciones.
